The protagonist of "Ficcionario" is Beto Benedetti, an immigrant who lives and works in the second category area of City, an anonymous metropolis that represents the concept of the empty signifier. This nameless city can very well be any city in the world.
Altuna divided his graphic novel in 8 chapters. In the first one, titled "Loyal and submissive" Beto Benedetti experiences firsthand the impotence of being a second class citizen. Frustrated and angry, he temporarily gains entrance into the prosperous side of City, and the contrast is brutal. Thanks to the spectacular artwork, is easy for us to see the differences between the two sectors of the metropolis.
Page after page, Altuna shares with us a unique visual feast, creating rich and vibrant panels, full of details that reveal the true dynamics of this city; the Argentinian artist brilliantly captures the filth and the extreme poverty of the second class citizens. This is made even more evident when some men steal the clothes and even the shoes from a recently deceased man. In the slums, prostitution reigns supreme, and it is common to find live sex shows: in exchange for a few cents, couples fuck for the amusement of any bystander. Street sex is a frequent and recurring visual leitmotif in subsequent chapters.
Second class citizens / ciudadanos de segunda clase |
In "The Immortal," Benedetti meets a very special man. This man, nicknamed the Immortal, belongs to a company that is experimenting with his body, thus giving him longevity and perfect health; his life is monitored and analyzed by scientists 24/7. However, sick and tired of his captivity, the Immortal escapes and chooses Benedetti as his sidekick. They roam the city, and through the dialogue we realize what is the author's political point of view (this particular creator was against the military dictatorship in Argentina, and this is quite evident here). What is better? To live luxuriously but enslaved or to be free and suffer in total poverty? For the Immortal, freedom is all that matters, but Benedetti finds comfort and luxury too tempting.
Altuna's pages are impressive: they have an undeniable erotic and aesthetic value. There is passion in the brothel scenes, but there is also peace and intimacy in the final sequence, when the Immortal plunges into the sea for the first time in his life. But time is running out, and his minutes of freedom are about to end. The final pages are quite melancholic.
"Love Story", as the title announces, is a romantic tale. But this is a love story that has more to do with catastrophe than optimism. The authorities warn the population of an imminent nuclear attack. They all flee in terror, running towards the shelters, but only a few have the authorization cards that will allow them entrance. Benedetti helps his friend to find the girl he is in love with; in the process, they both witness how people act like crazy.
Street sex is quite common / el sexo callejero es bastante común |
Brothel / burdel |
"The Siege" carefully recounts the details of everyday life for a second class citizen like Benedetti: the strict controls he is subjected to, the abuse committed by law enforcement agents, the systematic inspections at home, looking for "clandestine material" (or banned books). The scrutiny includes even Benedetti's sex life. In fact, thanks to the bio-computer that the state assigns to all citizens, there is a record of the protagonist’s most intimate activities. Everything is accounted for, down to the last orgasm.
In "The Deceased", one of Benedetti's co-workers is declared "deceased" by City's computer system. This man is still alive, but in a matter of days he loses everything that identifies him: his documents, his apartment, his job. Although Benedetti tries to help him, in the end is impossible to win the battle against the system. This is perhaps one of the most shocking stories, and the ending is extremely moving.
Finally, in "He comes and goes" we see what happens to second class citizens when they get older. Without resources, without stable housing, they are forced to go from one temporary home to another. The state, of course, is patiently waiting for them to die. But in the case of Sebastian, a harmless old man, the results will be unexpected. At first, Sebastian is reluctantly welcomed by Benedetti, who barely has enough room for himself in his tiny apartment. "If I can no longer be a consumer, then my life is worthless" utters the old man. And no one can refute that statement. So Sebastian decides to hasten his death, accepting the offer of a popular euthanasia firm.
The 'Immortal' enjoys his last seconds of freedom / el 'inmortal' disfruta sus últimos segundos de libertad |
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El sexo y la represión a menudo forman parte de una misma ecuación. Ya lo decía Freud hace casi un siglo: el origen de la neurosis es la represión sexual. Nosotros, como sociedad, cargamos con un fuerte legado represivo. En 1983, el autor argentino Horacio Altuna decidió hurgar a conciencia en esta aparente dicotomía: la sensualidad desbordada y el control riguroso, la voluntad de goce y la férrea imposición de la ley. Altuna, entonces, plantea un futuro alternativo que, pese a extravagancia, es absolutamente verosímil; un futuro en el que “hay ciudadanos de primera y de segunda, donde el estado es quien todo lo controla y donde sobrevivir es el pan de cada día”.
Under threat of a nuclear attack / bajo amenaza de un ataque nuclear |
El protagonista de “Ficcionario” es Beto Benedetti, un inmigrante que vive y trabaja en una de las áreas de segunda categoría de City, ciudad anónima que representa muy bien el concepto de significante vacío: al ser una ciudad desprovista de nombre propio es la ciudad en la que vivo yo, la ciudad en la que vives tú, cualquier ciudad del mundo, o todas ellas juntas a la vez.
Altuna divide esta novela gráfica en 8 capítulos. En el primero, titulado “Fiel y sumiso”, Beto Benedetti experimenta en carne propia la impotencia de no poder presentar cargos luego de haber sido perjudicado por un ciudadano de primera clase. La frustración, la rabia, pero también el deseo de justicia, motivan al protagonista a buscar una solución alternativa. Es así como ingresa temporalmente al lado próspero de City y el contraste es brutal. Gracias a las espectaculares ilustraciones, para nosotros es fácil apreciar las diferencias entre ambos sectores de la metrópolis.
Página tras página, Altuna nos proporciona un verdadero festín visual, creando viñetas ricas en movimiento y en detalles que revelan la verdadera dinámica de esta urbe; en las primeras páginas, el artista argentino plasma de manera brillante la sordidez, la inmundicia y la pobreza extrema de los ciudadanos de segunda clase. La miseria es evidente en las viñetas en las que la gente se abalanza sobre un hombre recién atropellado para robarle la ropa y hasta los zapatos. En los tugurios, reina la prostitución, y es común encontrar espectáculos de sexo en vivo: a cambio de algunos centavos, las parejas follan a vista y paciencia de los transeúntes. El sexo callejero será un leitmotiv visual frecuente y recurrente en todos los capítulos.
Running towards the fallout shelter / corriendo hacia el refugio nuclear |
Books are not allowed / los libros no están permitidos |
Prostitution area / área de prostitución |
Hay destrucción, vandalismo, violaciones, suicidios, asesinatos, masacres, robos de último minuto y orgías de último segundo. Todas estas imágenes son retratadas por Altuna con una gran maestría y un dominio envidiable de la plumilla y la tinta china. Hace falta mirar con atención cada viñeta, para no perderse ni una sola de las imágenes irónicas, crueles y absolutamente delirantes que el artista argentino reparte pródigamente. Finalmente, las autoridades aclaran que se trató de una falsa alarma. Pero las consecuencias son evidentes: hay miles de muertos y heridos regados por doquier. Benedetti, con la introspección que lo caracteriza, afirma lo siguiente: “con un par de alarmas como esta no tendrán necesidad de tirar ninguna bomba”. Tiene razón.
Sebastian & Beto Benedetti |
“El cerco” narra minuciosamente los pormenores de la vida cotidiana para un ciudadano de segunda clase como Benedetti: los rigurosos controles a los que es sometido, los abusos por parte de las fuerzas del orden, las revisiones sistemáticas en su propia casa, en busca de “material clandestino” (o libros prohibidos, que al final es lo mismo). El escrutinio abarca incluso la vida sexual de Benedetti. De hecho, gracias a la biocomputadora que el estado asigna a todos los ciudadanos, hay un registro de las actividades más íntimas del protagonista. Todo es contabilizado, hasta el último orgasmo.
En “El muerto”, uno de los compañeros obreros de Benedetti es declarado como “fallecido” por el sistema informático de City. Aunque este hombre todavía está con vida, en cuestión de días pierde todo lo que lo identificaba: sus documentos, su departamento, su puesto de trabajo. Aunque Benedetti hace lo posible para ayudarlo, al final la batalla contra el sistema es imposible. Esta es quizás una de las historias más duras, y el final es tremendamente impactante y conmovedor.
Finalmente, en “Ida y vuelta” vemos qué es lo que les pasa a los ciudadanos de segunda clase cuando llegan a una cierta edad. Sin recursos, sin vivienda fija, son forzados a ir de una vivienda temporal a otra. El estado, obviamente, lo único que tiene que hacer es esperar con paciencia a que estas personas mueran. Pero en el caso de Sebastián, un inofensivo anciano, los resultados serán otros. Al principio Sebastián es acogido a regañadientes por Benedetti, quien apenas tiene espacio para él mismo en su minúsculo departamento. “Si no sirvo para consumir, no sirvo para nada”, sentencia el viejo. Y nadie puede refutar esa frase. Así que Sebastián decide acelerar su muerte en una de las empresas de eutanasia que abundan en City.
“Ficcionario” es una extraordinaria novela gráfica que conjuga un guión audaz y genuinamente original, con un arte magnífico. Es la primera vez que leo algo no solamente dibujado sino también escrito por Horacio Altuna, y he quedado encantado. Será motivo para rastrear más obras suyas. Además, siempre es importante, así sea solamente en la ficción, contestar las preguntas que formula el autor argentino.